Qué pasaría
si un camión invadiera mi carril
si mi vena se aliara con el filo de una cuchilla
qué pasaría.
Si diez metros no me parecieran suficiente altura
si mi avión fuera un titular de prensa
si estuviera en el lugar equivocado
en medio de la ira de una creencia equivocada.
Qué pasaría
si una noche no respirara
si una mañana dejara de calentar el Cola-Cao en el microondas
qué pasaría.
Si ya no deseara conocer Buenos Aires
ni Tokio
si no quisiera hacer el amor en Baeza
ni soñara con bañar a mis futuros hijos en la cala de la Bugambilla.
Qué pasaría
si me la pelara el último libro de Murakami
y la última película de Isabel Coixet
qué pasaría
si me convirtiera en un personaje de Ricardo Menéndez Salmón
si cortara la raíz de la sonrisa
si preparara desde hoy un epitafio.
Qué pasaría.
jueves, 6 de agosto de 2009
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Pues contestando en orden: si un camión invadiera tu carril ya lo sabes; si te la pelara la última película de Isabel Coixet significaría que has madurado y ya no te la cuelan con queso; si te convirtieras en un personaje de Ricardo Menéndez Salmón serías muy desgraciada pero una desgraciada de gran literatura; si cortaras la raiz de tu sonrisa seguro que todos saldríamos perdiendo.
ResponderEliminarEspero que sigas siendo tú sin condicionales. Buen poema.
Un beso.
JLP
De acuerdo salvo en lo de Isabel Coixet jejeje qué gusto da que todos tengamos gstos dispares...otro beso para ti.
ResponderEliminarno pasa nada. A mi me la pela el último de Murakami (y los demás) y estoy la mar de... igual
ResponderEliminarEstá muy bien. Dan igual los comentarios. Los textos significan en sí mismos, no por lo que a cada cual -con o sin formación- le puedan parecer.
ResponderEliminarF.